Gracias a los 92 registros ciudadanos, recopilados
mediante la aplicación Survey123, para reportar avistamientos y ataques a ganado o
fauna silvestre por perros sin supervisión, dispuesta por WCS Chile desde 2020, se logró
identificar áreas con presencia de estos carnívoros. Posteriormente, el equipo del
programa de Conservación Terrestre instaló 20 cámaras trampa en cuatro sectores de
Tierra del Fuego: Parque Karukinka (sector Vicuña y Lago Escondido); sector alto de
estancias California y Rosa Irene, y el sector de Calafate.
El objetivo de la instalación de cámaras era registrar grupos de perros sin supervisión
humana en sitios críticos de Tierra del Fuego, identificados a partir de los reportes
ciudadanos. Se logró obtener, entre febrero de 2023 y enero de 2024: 611 registros (2.787
imágenes) de perros. De los cuales, el 85% corresponden a perros sin supervisión
humana, mientras que, en el 15% restante, los perros estaban junto a seres humanos.
De los registros de perros sin supervisión, se distinguen al menos cuatro grupos
diferentes (de dos o más individuos), donde se contabilizó un máximo de 7 individuos en
una de estas jaurías. En tres grupos (de los cuatro) se pudo identificar la presencia de
cachorros, siendo este un indicador que los perros se están reproduciendo de forma
activa en vida silvestre, sin ningún subsidio directo por parte de seres humanos.
Reportes ciudadanos permiten conseguir valiosa información
La puesta en marcha de los reportes ciudadanos en la región y la instalación de cámaras
trampa en Tierra del Fuego, buscaba cuantificar, caracterizar y situar geográficamente
ataques y avistamientos de perros sin supervisión humana, para evaluar y comunicar sus
efectos potenciales sobre la salud humana, la ganadería y la fauna silvestre. Además,
busca generar información científica respecto de la realidad local de esta problemática, la
cual difiere de otras zonas urbanas o periurbanas del resto del país. Y, sobre todo, busca
avanzar en propuestas de soluciones a esta problemática, en conjunto con todos los
actores involucrados.
En Magallanes, la presencia de perros sin supervisión humana es un problema tanto en
las ciudades como en las zonas rurales. Estos animales son una amenaza para los
ecosistemas y la vida silvestre, pero también afectan al turismo y principalmente a la
ganadería, la actividad económica más antigua de la región. Se estima que el 82,2% de la
depredación de ganado, según denuncias que recibió el Servicio Agrícola y Ganadero en
la región, entre los años 2012 y 2023, son atribuibles a perros.
Magallanes no cuenta con estudios sobre la problemática
Hasta ahora no existen estudios sobre la población de perros sin supervisión para la
porción chilena de Tierra del Fuego. Según encuestas realizas por WCS Chile, en 2019,
hay presencia de perros sin supervisión en el 48% de las estancias consultadas (36 de
75). Las encuestas, aplicación para reportar y el monitoreo con cámaras trampa,
representan un esfuerzo para visibilizar la magnitud del problema en Tierra del Fuego.
Si bien, la tenencia responsable es la solución definitiva del problema, esta se consigue a
largo plazo. “No obstante, considerando los efectos negativos de estos perros sobre la
biodiversidad y la producción animal, no es aceptable seguir esperando una mejora lenta
y gradual. Si no se toman medidas complementarias, se estará condenando tanto a la
fauna nativa como a las actividades productivas del ámbito rural, la salud y la seguridad
pública a impactos irreversibles”, comentó Cristóbal Arredondo, coordinador del Programa
de Conservación Terrestre de WCS Chile.