Nova Austral jamás ha instruido al personal de ocultar o manipular información a Sernapesca, o de llevar una “doble contabilidad”. Respecto de los correos incluidos en el reportaje de prensa conocido hoy, se realizará una investigación interna para confirmar que no hayan sido editados y manipulados por el denunciante anónimo.
Existen permanentes controles en la empresa y por parte de Sernapesca, respecto de todas las variables asociadas al cultivo, como es la mortalidad, entre otras.
Absolutamente toda la información ha sido consistente y no se han detectado desviaciones, lo que ha sido confirmado en las revisiones que permanentemente hace el Sernapesca. Hoy hemos instruido realizar un nuevo control.
Respecto de los correos emitidos por el centro, es evidentemente una interpretación equivocada al decir que las palabras “real” y “declarada” apuntan a engañar a la autoridad. Los firmantes de esos correos indican que toda la información se refiere a la real de esta semana comparada con la declarada la semana pasada.
Respecto de otros centros, a veces pueden presentar condiciones anaeróbicas de fondo, situación normal y que obliga al descanso del centro afectado. Una vez que el fondo recupera la condición aeróbica, se reinician los cultivos. Esto funciona porque los salmones generan materia orgánica que el medio es capaz de reciclar y recuperar sin problemas.
Las tablas que presenta la nota de prensa son confusas ya que son Excel y no son reportes normales de la empresa. Además, no son claros en mostrar que se traten de un mismo centro con números distintos.
La mortalidad es toda real y puede tener muchas causas. Cada pescado que muere es retirado de la jaula, se evalúa la causa de mortalidad, se rebaja del inventario y se destina a reciclaje a una fábrica de harina de pescado.
El número de peces muertos se reporta semanalmente a Sernapesca, quienes también llevan un control del inventario del centro. Si un pescado muerto no es rebajado en el inventario, entonces esa diferencia aparecerá en la cosecha, ya que no se puede cosechar y procesar pescado que murió hace semanas o meses.
La información en que muestra una mortalidad por BKD de 82.77% tiende a confundir, ya que es ese el porcentaje de los peces que murieron por esa causa, en circunstancias que la mortalidad fue de 0.35%, es decir, por esa enfermedad murió solamente un 0.29%.
No hemos podido confirmar la exactitud de ese correo, que habla sobre mortalidades en muchos centros, pero la empresa alguna vez ha tenido mortalidades superiores a ese 15%, lo cual ha sido debidamente informado a Sernapesca.