Con el objetivo de fortalecer la prevención, detección temprana y coordinación interinstitucional, la
Seremi de Salud de Magallanes lideró la realización de la Mesa Intersectorial de Tuberculosis. Esta
instancia reunió a representantes de diversos organismos públicos y privados, con el propósito de
abordar de manera integral la tuberculosis en la región.
La encargada del Programa de Tuberculosis de la Seremi de Salud, Mónica Rosas, explicó que “como
Seremi una de nuestras funciones es liderar una mesa de trabajo intersectorial con instituciones que
estén relacionadas con grupos vulnerables de presentar tuberculosis. Se realizó una reunión en la que
convocamos a diversas instituciones que están relacionadas con personas mayores, programas de
situación de calle, entre otros. La idea de esta actividad es que nos coordinemos y que ante cualquier
caso en que haya una sospecha o un caso de tuberculosis en alguna de estas instituciones, las acciones
sean más expeditas, además de coordinar la realización de capacitaciones para que conozcan la
sintomatología y tratamiento de esta enfermedad”. Esta mesa constituye un espacio de colaboración y
cooperación en beneficio de la salud de la población magallánica, que busca dar una respuesta
articulada frente a esta enfermedad.
La tuberculosis es una enfermedad contagiosa que se propaga por el aire y afecta principalmente los
pulmones, pudiendo igualmente afectar otros órganos del cuerpo. La fuente de infección son otras
personas que presentan de tuberculosis pulmonar. Cuando una persona enferma tose, estornuda,
habla o escupe, expulsa al aire bacilos de la TBC, pudiendo contagiar a las personas más cercanas o
que conviven bajo el mismo techo.
Las personas con mayor riesgo de presentar esta enfermedad son los contactos de un enfermo con
tuberculosis pulmonar sin tratamiento, los adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
Los síntomas comunes de la tuberculosis pulmonar activa son tos productiva (con expectoración), a
veces con sangre en el esputo, dolores torácicos, debilidad, pérdida de peso, fiebre y sudores
nocturnos.
Es importante señalar que una persona con tos y expectoración o desgarro por más de 15 días, y que
además presente los síntomas anteriormente mencionados, podría tener tuberculosis, por lo tanto, es
importante que se dirija a cualquier establecimiento de salud primaria (CESFAM, CECOSF) para solicitar
un examen de detección de la tuberculosis, que consiste en una muestra de esputo (flema que sale
desde el fondo de los pulmones).
Si el examen resulta positivo, el establecimiento de salud le entregará gratuitamente el tratamiento, el
cual se prolonga durante seis. Si la persona no cumple el periodo de tratamiento, puede reaparecer la
enfermedad.