Durante los últimos meses más de doscientas naves pesqueras internacionales efectuaron su cambio de zona de pesca del calamar gigante desde el océano Pacífico hacia el Atlántico, y puedo asegurar que cumplieron los estrictos controles y normas establecidas para cualquier nave que se encuentra en nuestro Territorio Marítimo, ya que como Armada de Chile, las Supervisamos por tierra, aire, mar y también bajo la superficie del mar, desde su ingreso a Límite Marítimo Internacional frente a las costas de Arica, hasta su abandono de aguas nacionales con su llegada al Océano Atlántico, lo que incluye un pequeño grupo de pesqueros aventureros que decidieron hacerlo por el temido paso Drake.
Este esfuerzo, el cual es permanente, incluye una activa red de faros y alcaldías de Mar, señalización marítima, control y vigilancia con unidades Navales de superficie, submarinas y aeronavales, monitoreo y coordinación de traspaso de prácticos, con el objetivo de resguardar la vida humana en el mar y nuestra soberanía territorial marítima.
Esta intensa actividad nos recuerda la importancia de el Estrecho de Magallanes como una de las principales rutas marítimas del mundo, en donde más de 2000 naves pesquera, de carga e industriales lo utilizan, siendo la actividad marítima un punto de encuentro que permite el desarrollo e impulso de nuestro país.
Es por lo cual que deseo poner en Relevancia la preparación constante y actividad operativa ininterrumpida de la Institución para esta tarea fundamental, que es el resguardo de los intereses Marítimos, acción concreta de la Armada de Chile en el desarrollo de nuestro país.
Leonardo Chavez A.
Contraalmirante
Comandante en jefe Tercera Zona Naval