Con fecha 08 de julio de 2020 se interpuso un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, en contra del alcalde Claudio Radonich, por el recurrente y abogado patrocinante Óscar Gibbons, que solicita orden de no innovar. En referencia al inicio de tala de los árboles centenarios en Punta Arenas, la petición concreta es que una comisión interdisciplinaria realice un estudio exhaustivo de los árboles que se pretende eliminar, recomiende si ello se debe llevar a cabo, en qué forma o si hay otras soluciones posibles, para que deje de ser una decisión tomada en forma arbitraria y unipersonal por el alcalde, en base a un informe incompleto, restableciendo el imperio del derecho.
El escrito señala que la adjudicación del estudio Diagnóstico por imágenes del estado de conservación de 60 árboles longevos de la ciudad de Punta Arenas benefició a la empresa Poda & Talas Chile Limitada, que se según consta en información disponible en su página web contaba con una experiencia de tres años al momento de la licitación, lo cual resulta relevante, dado que en las bases de dicha licitación se confería un 20% para este criterio de evaluación.
El 12 de junio de 2018 la Comisión Evaluadora extendió el Acta de Adjudicación y al día siguiente, la recurrida emitió el Decreto N° 1484, oficializando dicha adjudicación. En tanto que la empresa adjudicataria, emitió su informe en julio de 2018 y en él se señala: “La metodología de trabajo se construyó de acuerdo a lo solicitado en las bases técnicas de la licitación y en conjunto a la Unidad Técnica de la contraparte, Dirección de Aseo y Ornato, I.M. de Punta Arenas.”
Según el recurso, esto es relevante, ya que según los expertos nacionales e internacionales, determinar el estado de salud de un árbol solamente con imágenes de tomografía, no es posible. En cuanto a lo que se debe analizar, para evaluar correctamente el estado sanitario de cualquier árbol cita: “Sanidad del árbol, presencia de agentes patógenos que provoquen deterioro del arbolado; forma del árbol, la relación de la forma del fuste con respecto al grado de inserción en el suelo; daños físicos o mecánicos, cualquier acción del hombre en deterioro del árbol, clavos, alambres, cuerdas que se colocan en los árboles, por nombrar algunas variables más importantes” (Macarena Soledad Morales Pizarro «Evaluación del estado de conservación del arbolado urbano, en sector de la ciudad de Coyhaique con mayores demandas de intervención”).
Asimismo, el escrito afirma: “El ingeniero forestal local don Juan Ruíz, señaló que el informe era incorrecto, tanto en su metodología como en el análisis de los resultados de las tomografías, dado que generalmente estas no muestran un grave estado sanitario de los árboles que determina necesario eliminar, como lo señalan los informantes. Además señaló que faltó un elemento de análisis muy particular de la zona, en cuanto a la posición de cada árbol respecto del viento dominante, porque esto es lo que realmente informa cual es el riesgo de pérdida de ganchos o de caída”. En otro ámbito, el recurso señala que el alcalde Claudio Radonich en la Sesión Ordinaria del Concejo Municipal N° 135, de fecha 26 de junio de 2020, informó a los concejales que la tala comenzaría el día 6 de julio de 2020, a lo que tres concejales manifestaron su oposición, respondiendo aquél que esto no era debatible, ya que él había tomado por sí en forma definitiva tal decisión. Sobre lo cual destaca: “Llama la atención a esta parte, que el Sr. Alcalde al informar su decisión de eliminar los árboles al Concejo Municipal y al dar a conocer esta noticia a los medios de comunicación, expresó que el estudio de los árboles longevos costó casi 50 millones de pesos, lo que ha repetido en varias ocasiones, pese a que la licitación se adjudicó por $ 12.480.000.- exento de I.V.A.”.