Producto del constante monitoreo de las redes de distribución de gas natural, GASCO Magallanes ha identificado diversas irregularidades en las conexiones domiciliarias y redes de distribución de gas natural, los cuales conforme a la normativa vigente son calificados como “actos irregulares” que pueden poner en riesgo la integridad y seguridad del servicio. Las autoridades competentes han sido informadas para su debida investigación de estos hechos.
En particular, se ha observado con especial atención la intervención en los medidores de gas, que puede conllevar a la falsificación del registro de los consumos, ya sea por la acción de terceros o mediante conexiones irregulares realizadas directamente en el empalme, lo cual impide la medición adecuada.
Asimismo, se informó que está prohibida cualquier acción que implique la reactivación de un servicio suspendido —por motivos como la morosidad o la detección de fugas en las redes interiores— cuando dicha intervención sea ejecutada por personas ajenas a GASCO Magallanes. Estas prácticas generan un riesgo inminente de incendio o explosión, con potenciales daños a la propiedad y a la integridad de las personas.
Además, queda expresamente prohibido alterar el uso destinado al gas suministrado o modificar las condiciones del servicio sin la debida acreditación ante la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, como ocurre, por ejemplo, cuando se incrementa el consumo en el interior de una propiedad sin la evaluación de un instalador autorizado.
En caso de detectarse cualquier acto irregular, la empresa procederá a suspender de forma inmediata el servicio, ya sea a nivel del medidor o de la red de gas, y notificará a la autoridad correspondiente. Cada una de estas alteraciones expone a los usuarios y a las instalaciones a los riesgos inherentes a la manipulación de los sistemas de distribución de gas natural. Asimismo, se ha informado que los costos asociados a la regularización de tales irregularidades serán de cargo del cliente o consumidor.