Se cuenta que, en medio de una crisis que hacía peligrar su gobierno, el presidente de Chile Ramon Barros, recibió una serie de telegramas, donde los ministros de su gabinete, le mostraban su apoyo. “Era que no”, fue la escueta y sabia declaración del presidente.
Esta semana, pudimos leer en un matutino nacional, la “carta al director” de cinco ministros de estado, donde expresan que no es cierto, de que tengan una opinión contraria al presidente Piñera. Se refieren al requerimiento de La Moneda al tribunal constitucional. “Era que no”, debe haber pensado el superior jerárquico y jefe político de los ministros. Así estamos en Chile, amigos y amigas. En medio de la pandemia del siglo, con esfuerzos titánicos del sector salud, y de la población, por contenerla. Y al mismo tiempo, un mal gobierno, que cada día aporta más argumentos a sus detractores. Es que el presidente, después de la presentación ante el TC, para impedir un tercer retiro de ahorros previsionales, y de defender su postura, ante un país entero. En los últimos días anuncia, que está preparando su propio proyecto para realizar el tercer retiro. Es inentendible. Y ha sido fuente de descontento para la población, que empezó a salir a protestar nuevamente. También una causa para activar a un movimiento sindical, más bien silente el último año.
En cuanto a la oposición, los últimos eventos, le dan una razón más para alcanzar la tan difícil y anhelada unidad. Todos miran lo que ha pasado en el Perú, donde más de una docena de candidatos, disputaron votos del mismo sector político, y hoy compiten en segunda vuelta los dos extremos, de derecha e izquierda. Existen muchas razones para entender que la unidad de la centro izquierda, es la que permitirá continuar en carrera hacia La Moneda. Pero ninguna razón parece ser lo suficientemente poderosa, para llegar con candidatura única a la primaria presidencial.
Esta semana, las dos candidatas de centro izquierda Paula Narváez y Ximena Rincón, hicieron una inédita propuesta conjunta. Plantearon al gobierno, la necesidad de establecer una renta básica nacional, que permita a las personas, sin distinción, sobrellevar esta crisis. El gesto tiene un fuerte simbolismo. Es un rechazo al intento de algunos de marginar a la DC, y es un desafío a los varones candidatos del mismo sector político. Al igual que en Perú, nos acercamos a las elecciones, sin rastros de lo que quieren los electores. Las encuestas políticas, han sufrido los efectos de la pandemia, y hoy sólo muestran magros resultados para todos. Su poder predictivo, está en duda. Y por tanto ninguna decisión, se tomará, como en aquella infausta jornada de 2017, cuando por ese argumento, se desechó la candidatura del presidente Lagos.
Son tiempos inciertos para todos. En la derecha, la eclosión de candidatos, no produce mayor entusiasmo, aunque recorran matinales, y revistas de papel cuché, son expresiones marginales. Difícilmente se distingue una candidatura de otra. Las dificultades para desplegarse en campaña, por las restricciones sanitarias, son suplidas por algunos, recurriendo a lo más tradicional y predecible. En el caso del PC, los ritos y formas de un anunciado comité central, que proclama, sin sorpresa alguna, al alcalde Jadue, como su candidato. En otros casos, se da el salto a las plataformas virtuales. No sin cierto riesgo, debido a la sobre saturación de la oferta multimedia, donde la entretención, el estudio, y el trabajo, usan los mismos espacios virtuales. Creo, que la forma en que está usando estos medios, la candidatura de Paula Narváez, es una apuesta valiente, y que representa un gran realismo. Simplemente, no vamos a volver, en el corto plazo, a las plazas y a las ferias libres, ni a los teatros o estadios, para grandes manifestaciones públicas.
Debo reconocer, que no me convencía mucho esto de la actividad política, por zoom o Google meet. Sin embargo, he tenido ocasión de participar en dos actividades, de la candidatura de Paula Narváez, y más allá, de que es mi candidata. Debo decir, que estoy gratamente sorprendido, de la forma en que se está empleando estas herramientas virtuales. Conversando posteriormente con personas que también participaron, se comprueba: Es mejor que las dinámicas tradicionales, porque se puede interactuar más con la candidata; el trabajo en grupos es más dinámico, se va a la medula en los temas; existe una transversalidad desconocida en las campañas tradicionales. En lo que respecta a los temas que me interesan sobre desarrollo regional y descentralización, así como en cuanto al plan de zonas extremas, para Arica Parinacota, Aysén y Magallanes. La candidata Paula Narváez, no sólo está al tanto de lo que ha significado el PEDZE en Magallanes, sino que es partidaria de que se establezca como una política regional de desarrollo, permanente. Que no dependa de los gobiernos de turno. También apoya un fortalecimiento de la ley de rentas regionales, para un financiamiento efectivo de las regiones. Así mismo, manifestó su disposición a revisar la figura del delegado presidencial, para reducir sus atribuciones y competencias, potenciando al gobernador regional. En mi opinión el delegado presidencial, debiera eliminarse, pero con toda seguridad será materia de discusión constituyente.
La semana concluyó con la esperanza de que el presidente, acepte el planteamiento de la presidenta del senado Yasna Provoste, y retire su requerimiento al TC, y promulgue el proyecto aprobado ampliamente en el parlamento. Sería una señal de sensatez, que permitiría descomprimir la tensión social acumulada, aliviar el dolor y la angustia de millones de personas.
Para evitar el mal gobierno, debe apoyarse alternativas viables, innovadoras, con el coraje de desafiar el estatus quo, yo apoyo a una candidata de regiones.
Ernesto Sepúlveda Tornero