“Desde el año 1998 que la Asamblea General de Naciones Unidas, siguiendo las recomendaciones de la Conferencia Mundial de ministros de la Juventud resultante del año 1997, declaró el 12 de agosto como el Día Internacional de la Juventud, donde la ONU recalcó la necesidad de la comunidad internacional, de poner atención a los problemas de la juventud y destacó la necesidad de desarrollar el potencial de los jóvenes como socios de la sociedad actual” (un.org). En Chile en tanto, desde el año 1994 al 2008, dos políticas de salud integral dirigida al segmento joven, emanaron de expertos/as nacionales, quienes insistieron que muchas de las problemáticas juveniles relacionadas con el embarazo no planificado, las infecciones de transmisión sexual, las adicciones, entre otras, debían tener un abordaje multidisciplinario y contextualizándose en cada territorio. Es así como desde año 2008 en Chile, hasta la actualidad, se dio cita a una propuesta de trabajo conjunto entre Estado y jóvenes, para avanzar en aquellos temas de Salud Pública que resultaban por sus altas cifras, preocupantes, pero que podían disminuir con una variada gama de acciones, que propendieran a una mejor calidad de vida juvenil.
La importancia de la participación juvenil informada:
En este contexto, la creación de la orgánica de los consejos asesores consultivos de Salud, surgieron como una de las propuestas más innovadoras potenciadas en el marco del Plan Andino para la Prevención del Embarazo Adolescente, donde Chile junto a otros países del cono sur, identificaron el componente de “participación juvenil” como un pilar básico y un factor protector ancla, para cualquier planificación de un país, que busque disminuir indicadores que alteran la calidad de vida esperada en la juventud.
El siguiente paso, era sin duda, llegar a los/as Jóvenes, fortalecer la idea que son sujetos de derechos y no sólo usuarios de atenciones de salud y escuchar esas voces, que, para ese tiempo, ya se escuchaban desde los distintos territorios del país.
En Magallanes y Antártica en tanto, surge uno de los consejos asesores de “Salud Joven” más antiguos del país y donde al menos 300 jóvenes desde sus inicios, han sido capacitados en temas de salud elegidos por ellos, han realizado trabajos educativos entre pares, con educaciones en calle, establecimientos educacionales o medios de comunicación y redes sociales, siendo referentes juveniles en la Región, para temas relacionados al Embarazo Adolescente, Conducta Sexual Segura o la Prevención del Suicidio entre otros.
La Autoridad Sanitaria y la mirada Juvenil en épocas de COVID:
El trabajo en Pandemia ha sido un desafío permanente para la Autoridad Sanitaria, la cual he tenido un rol preponderante en la fiscalización , vigilancia y en la Estrategia de Testeo, Trazabilidad y Aislamiento (TTA) como también en la coordinación de las campañas de vacunación.
La labor ha considerado, en detalle, la búsqueda activa de casos a través de operativos territoriales con la toma de PCR o Test de Antígeno, la trazabilidad de todos los casos positivos y sus contactos estrechos, el determinar su aislamiento en residencias sanitarias o la vigilancia del cumplimiento de aislamiento en sus hogares.
La vigilancia en los puntos de fronterizos como fue en su momento el control de barreras y cordones sanitarios., tanto aéreos, terrestres como marítimos. La vigilancia epidemiológica ha sido permanente y las campañas de vacunación contra el Covid han implicado un gran despliegue desde la recepción de vacunas, la distribución y su administración.
A su vez, la información de la comunidad a través de las cuadrillas sanitarias y cuadrillas escolares, la calendarización de las administración de las dosis, la realización de diversos operativos para acercar las vacunas a la comunidad como la posibilidad de testearse todos los días en los diversos puntos de la región.