Desde el Colegio de Trabajadores Sociales de Magallanes, lamentamos los procesos de cierre de diversos Programas de Atención de lactantes, niños, niñas y adolescentes, tanto Ambulatorios como Residenciales, con gran capacidad técnica e identidad regional – territorial que se producirá en los próximos días a razón de las licitaciones obtenidas por otras entidades nacionales, que desconocen el contexto local, considerando además que son más efectivos aquellos programas sociales representativos del territorio, que alcanzan mayor identidad y cercanía como actores relevantes de la política pública de prevención y protección en infancia.
La complejidad de las problemáticas que se abordan con las familias magallánicas que acceden a la red de infancia de SENAME requieren de toda nuestra preocupación ya que no podemos permitir que los niños y niñas sigan siendo considerados como objetos, es urgente el cambio del paradigma a sujetos de derechos, por ello hacemos un llamado a las autoridades regionales y nacionales a considerar las competencias y conocimientos de los equipos profesionales adquiridos a lo largo de muchos años por éstas instituciones, así como el contexto sociocultural de nuestra población en los procesos de evaluación, ya que invisibilizar la realidad de nuestras familias, genera procesos erráticos y poco certeros en la gestión de los procesos de intervención.
La protección y cuidado de las historias de vida de las familias debe estar en la preocupación de cada acción de cierre y traspaso que se pueda llevar a cabo en los Programas de Intervención de la Red Sename, así como el cumplimiento del interés superior del niño, niña y adolescente, garantizando sus derechos fundamentales en todo momento, y no el mercantilismo de la atención.
De igual forma, resulta fundamental el resguardo de los derechos laborales de los trabajadores que quedarán cesantes y de los nuevos equipos con el cumplimiento de condiciones socio laborales dignas considerando el contexto sociosanitario actual.
Los niños, niñas y adolescentes requieren toda la atención y protección de sus derechos por parte de la institucionalidad del Estado de Chile, y el avance de la política pública en su defensa como eje real de la gestión de la Red Sename, que debe vincularse con el más alto nivel técnico de atención para con los niños, niñas y familias de Magallanes.