La revelación del nuevo anquilosaurio Stegouros elengassen que habitó el valle del río de las Chinas, Cerro Guido en la Patagonia Chilena hace más de 70 millones de años en el Cretácico tardío, fue catalogado como un hallazgo de clase mundial, una noticia que obtuvo la portada de la revista Nature y fue difundida ampliamente por medios nacionales e internacionales, siendo traducida a varios idiomas diferentes.
Este dinosaurio de pequeño tamaño y con una cola armada similar a un garrote azteca tuvo este jueves su lanzamiento oficial en la región y particularmente en la comuna donde se realizó este gran descubrimiento, lugar que está estrechamente vinculada con Antártica. La presentación estuvo a cargo de los investigadores de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile, Alexander Vargas y Sergio Soto y del director del Instituto Antártico Chileno (INACH), Dr. Marcelo Leppe Cartes, quienes se trasladaron hasta la villa Cerro Castillo en la comuna de Torres del Paine, donde pudieron compartir sus experiencias y nuevos conocimientos con la comunidad y autoridades regionales.
“Me parece fantástico que la comunidad tenga tanto interés en estos temas y se ve que el interés es creciente, ya que no solo queda relegado a la esfera científica, sino que la gente quiere entender y ser parte de estos hallazgos. Creo que esto da identidad local, permite a la comunidad se haga parte de estos descubrimientos científicos”, agrega el paleontólogo de la Universidad de Chile e investigador principal, Sergio Soto. El paleontólogo, agrega además que es muy importante esta noticia, ya que este dinosaurio es único en su tipo, y presenta una forma que no se había conocido, ya que pertenece a un grupo conocido como acorazados.
El Dr. Alexander Vargas, también paleontólogo de la Universidad de Chile, y uno de los investigadores del proyecto, comentó que “este dinosaurio acorazado viene a reformar la historia de los dinosaurios. Un hallazgo realmente importante, ya que tiene un arma muy extraña en la cola, que parece una mezcla de dinosaurios acorazados que conocíamos antes, y ha sido destacado en la portada de la revista Nature”. Además, Vargas apuntó que siempre supieron durante tres años y medio que era un hallazgo importante y lo pudieron estudiar muy bien. “Este es un trabajo liderado por científicos chilenos, y gracias al financiamiento de nuestro proyecto anillo pudimos tener todos los recursos necesarios para estar presentes en la revista científica más influyente a nivel mundial”.
A su vez, el Dr. Marcelo Leppe, Director del Instituto Antártico Chileno (INACH), agregó que “es una tremenda oportunidad retribuir el apoyo que nos ha dado la comuna de Torres del Paine, específicamente Cerro Castillo y Cerro Guido que han apoyado parte importante de esta investigación”. Leppe subrayó además que llevan diez años trabajando en el Valle de las Chinas y Cerro Guido y los hallazgos paleontológicos se dan en un contexto de constante colaboración con la comunidad. “Hemos traído una gran cantidad de material educativo y las reconstrucciones del dinosaurio, y lo más importante, tratar de poner en contacto con su historia pasada, no solamente con la historia humana, sino que la historia natural de la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena”.
Por otra parte, los y las asistentes a la actividad pudieron apreciar una réplica de este ejemplar y además ser testigos de la revelación de la nueva portada de la prestigiosa revista Nature que incluye una ilustración del nuevo dinosaurio, siendo la primera vez que incluye en primera plana un protagonista magallánico.
La alcaldesa de Torres del Paine, Anahí Cárdenas Rodríguez, mencionó el hecho de que este nuevo dinosaurio haya sido presentado en su comuna “para Torres del Paine este nuevo hallazgo paleontológico es sumamente importante para nuestra comuna y nuestro país. Esta comuna de Torres del Paine ha ido evolucionando, de ser ganadera, pasó a ser una comuna turística y hoy en día a una comuna científica”. La alcaldesa agregó también que estos hallazgos abren una nueva ventana a lo que es el turismo de intereses especiales con los hallazgos paleontológicos. “Esta charla y presentación que tuvimos de los investigadores aquí en cerro Castillo, es muy importante para que los vecinos sepan en qué territorio están”.
Sobre este nuevo dinosaurio
En febrero de 2018, en el marco de la LIV Expedición Científica Antártica (ECA 54) organizada por el INACH, paleontólogos de la Universidad de Texas dieron cuenta del hallazgo de unos huesos que afloraban en el terreno, fue entonces que el equipo chileno de paleontólogos de vertebrados se acercó al lugar y retiraron el bloque de yeso que contenía el esqueleto casi completo (estimado en un 80 %) y semiarticulado de este nuevo anquilosaurio, relacionado con el Kunbarrasaurus ieversi de Australia y el Antarctopelta oliveroi de la península Antártica, todos provenientes de Gondwana.
Destaca también su cola formada por siete pares de depósitos óseos aplanados fusionados en una estructura plana similar a las hojas del helecho (o fronda) a lo largo de la parte distal de su cola, diferenciándolo notoriamente de los pares de picos de otros dinosaurios blindados, como los estegosaurios.
Su nombre proviene de las palabras griegas “stego” que significa techo y “uros” que es cola, en una clara referencia a su cola blindada. En tanto, la denominación “elengassen” se basa en la mitología Aonikenk o tehuelche que representa a un animal similar a los armadillos actuales o a los extintos gliptodontes, unos mamíferos acorazados.