El proyecto “Fortalecimiento de la Red de Rehabilitación con base comunitaria” adjudicado por el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis) a la carrera de Terapia Ocupacional de la UMAG, es una iniciativa que busca favorecer, en Magallanes, el acceso de niñas, niños y adolescentes (NNA) con discapacidad, sus familias, cuidadores y comunidad, a procesos socio comunitarios de rehabilitación integral en diversos contextos locales.
Como parte de su propósito, este plan de trabajo contempla prestaciones de rehabilitación integral en dependencias del Centro Asistencial Docente y de Investigación de la UMAG (CADI) y sus modernas salas de especialización en la disciplina, donde funcionan diversos programas docentes asistenciales de la carrera, tales como Atención Temprana y de Psicomotricidad, Integración Sensorial y Desarrollo Infantil, y Órtesis y Ayudas Técnicas, al que se sumó, en el marco del proyecto, un programa vinculado a atenciones del Trastorno en el Espectro Autista (TEA).
Cumpliendo poco más de un semestre en la ejecución, el equipo de trabajo conformado por terapeutas ocupacionales docentes y también estudiantes de los últimos niveles académicos, dieron cuenta a las autoridades universitarias encabezadas por el rector Juan Oyarzo, de los avances y logros obtenidos con la comunidad magallánica y, en paralelo, mostraron, in situ, las intervenciones realizadas de manera presencial y telemática en el recinto que hoy alberga el quehacer asistencial docente y de investigación del área de la Salud de la UMAG.
Beneficiarios/as y prestaciones
La terapeuta ocupacional y académica Melissa Hichins, en su calidad de coordinadora del proyecto, informó que desde enero a julio de 2021 las atenciones alcanzan a 70 beneficiarios/as directos de toda la región, es decir, NNA, a quienes, como establece la iniciativa, deben sumarse sus familias y todo su entorno comunitario, lo que incrementa la cifra total a 300 personas solamente en un semestre. “Además de eso -enfatizó- estamos llegando a casi mil prestaciones de Terapia Ocupacional en modalidad presencial y modalidad telesalud”.
Para la profesional, estos primeros resultados “nos tienen muy contentos, porque el proyecto nos ha conducido a colaborar con las necesidades que tiene la comunidad, sobre todo ahora en contexto pandemia, donde hay muchas instituciones del área de la Salud que no están haciendo estas atenciones y que hoy día, la Universidad de Magallanes, a través del CADI, viene a otorgar”. En ese sentido, subrayó que trabajan con una población que tiene discapacidad permanente y que, hoy día, necesitan, por ello, de una atención constante de Terapia Ocupacional, lo que se está brindando de manera gratuita.
Al respecto, el rector Oyarzo, manifestó que “como Universidad nos sentimos orgullosos de tener este tipo de proyectos, más aún con nuestro cariz público. Lo que realizan es realmente importante, porque trabajan con niños y adolescentes con alguna discapacidad, entonces es una labor muy linda. Quedamos muy felices y sabemos que tienen un convenio actualmente con el Senadis, con quienes vamos a tener posiblemente una conversación para ver de qué manera nos pueden seguir apoyando, pero la idea es continuar a disposición de la comunidad”.
Dado este positivo balance y en el marco de su visita a la región, este viernes, la subsecretaria de Servicios Sociales del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, Andrea Balladares, pudo conocer las dependencias del CADI y parte del desarrollo del proyecto de rehabilitación, cuya ejecución felicitó, calificándola como de primer nivel. “Realmente el centro que hemos visitado hoy día, la integración que tienen, el trabajo con las familias y la calidad con la que entregan cada una de las terapias, es de primer nivel. Y en eso, nosotros como Gobierno, lo que queremos hacer es apoyar este tipo de iniciativas, seguir comprometiéndonos en que puedan continuar, obviamente apoyarlos con recursos, para que más familias de Magallanes puedan recibir esta atención de tan alto nivel”, señaló.