Una parte importante de la vida humana está compuesta por el sueño. No es casualidad que éste periodo ocupe casi un tercio de nuestra vida diaria, tiempo importante para poder recomponer el cuerpo y estar activos al día siguiente.Sin embargo, a medida que los años pasan, las preocupaciones y distintos hábitos actuales no permiten mantener una buena calidad del sueño, lo que también va afectando el sistema cognitivo y produciendo un mayor deterioro en las personas, situación muy poco sana para tener una vejez adecuada.“A toda edad es importante y debe ser motivo de preocupación si alguien no tiene una buena calidad de sueño. Éste permite que nuestro cerebro descanse y se resetee como para partir el día, por lo tanto, en una persona mayor se hace mucho más importante la calidad del sueño, las horas del sueño, y que sea un sueño reparador para que efectivamente pueda tener un buen desempeño durante el día”, afirmó el médico geriatra, Ramón Lobos.El profesional indicó que “uno de los trastornos habituales en torno a los cuadros de deterioro cognitivo, de demencia, es que justamente estos trastornos del sueño se evidencian. Los cuadros de confusión, las primeras manifestaciones, son cuando la persona ya no duerme de noche. Por eso es importante mantener una adecuada condición del sueño. Una mala calidad del sueño hace que la persona se deteriore mucho más rápido”. Uno de los puntos importantes para cuidar y preparar la vejez, tiene que ver con la preocupación por mantener buenos hábitos durante la noche. “Si nosotros queremos cuidar nuestra vejez, tenemos que acostumbrarnos a dormir bien. Las trasnochadas son enemigas de un buen envejecimiento. La vida sana siempre lleva a un mejor envejecimiento. En ese sentido, siempre es importante la higiene del sueño: qué es lo que vamos a comer antes de acostarnos, cuáles van a ser nuestras rutinas antes de acostarnos, hacer toda una serie de cambios que permitan que la persona, especialmente la persona mayor, vaya estableciendo rutinas antes de dormir”, explicó el doctor.Entre los consejos, se encuentran el darse un baño antes de dormir, tomar una leche caliente, leer, dormir en una habitación cómoda, confortable, hacer ejercicios suaves, como Yoga, o escuchar música de relajación. “Esto permite que al repetir la secuencia, el sueño llegue en forma aprendida. Que es distinto a ir a acostarse y prender la televisión, ponerse a comer cosas, leer, fumar, tomar café de noche, bebidas cola, chocolate. También comidas muy grasas, con mucho aliño, atentan a la calidad del sueño, por lo tanto, es importante eso”, explicó el especialista.
