El histórico estrecho de Magallanes es un sitio
privilegiado para la observación de fauna marina. Sus gélidas aguas son el paso obligado
de ballenas jorobadas que se alimentan en el Parque Marino Francisco Coloane; de
elefantes marinos que mudan piel en bahía Jackson y de albatros de ceja negra que
esperan anidar en el Área Marina Costera Protegida de Múltiples Usos (AMCP MU) Seno
Almirantazgo.
Lobo marino común, ballena sei y minke, orcas, foca leopardo, pingüino de Magallanes o
penacho amarillo, son solo algunas de las especies que se pueden avistar en este paso
que conecta los océanos Pacífico y Atlántico, y que se concentran en las áreas marinas
protegidas de la región.
WCS Chile trabaja en el fortalecimiento del monitoreo de los principales objetos de
protección de las áreas marinas protegidas, sus amenazas, y de otras especies clave que
habitan o transitan por el estrecho. Esto considera robustecer la colecta de datos de
acuerdo con las necesidades de los administradores de las áreas (MMA, SERNAPESCA y
CONAF), en colaboración con usuarios y otras partes interesadas.
«El uso de un modelo colaborativo para obtener datos en terreno, de manera
estandarizada, permite a las instituciones administradoras tomar decisiones más
informadas. Además, esta herramienta está disponible para los usuarios del área, quienes
pueden utilizarla para sus propios objetivos. Estas acciones no solo mejoran la calidad de
la información, sino que también fortalecen la gobernanza colaborativa, creando espacios
de intercambio y promoviendo la discusión entre los interesados de la gestión adecuada
de las áreas protegida», comentó Francisco Brañas, profesional de Áreas Marinas
Protegidas de la Seremi del Medio Ambiente de Magallanes.
Para lograr generar una mayor cantidad de datos sobre estos objetos de protección, y
luego de una exitosa experiencia en el Parque Karukinka, WCS Chile comenzó la tarea de
capacitar a distintos grupos de ciudadanos usuarios del estrecho de Magallanes, como
pescadores, operadores turísticos y servicios públicos, en la plataforma SMART: una
herramienta de gestión y monitoreo espacial para áreas protegida que se utiliza a nivel
mundial. Los datos pueden ser tomados con un celular o tablet y se transfieren a una
base de datos centralizada casi en tiempo real.
Las capacitaciones de SMART, que se han desplegado de Puerto Natales a Puerto
Williams, contaron con la retroalimentación de los ciudadanos, quienes han contribuido a
perfeccionar esta herramienta, adecuándola al contexto regional. “Esta iniciativa ha
logrado que los actores locales contribuyan de manera activa, mostrando un gran interés
por aprender a usar SMART, y, lo más importante, colaborando en la toma de datos que
permitirá una mejor gestión de las áreas marinas protegidas de la región”, comentó
Cristóbal Arredondo, coordinador del Programa de Conservación Terrestre de WCS Chile.
Una mayor cantidad de información de la fauna marina permitirá tomar mejores
decisiones para su conservación, pero, además, es una oportunidad para que se haga de
manera conjunta con la comunidad que habita y utiliza el territorio. La documentación de
estas especies permite ponerlas en valor y protegerlas.
Los números del monitoreo
Después de varios meses de implementación de este piloto de monitoreo participativo,
WCS Chile ha logrado entrenar a cerca de 100 personas en las cuatro provincias de
Magallanes. Hasta la fecha, la plataforma registra observaciones, tales como: 32 ballenas
(27 jorobadas y 5 sei); 21 delfines australes y 2 delfines chilenos; 5 reportes de elefantes
marinos y 9 de focas leopardo. La información que recoge la aplicación da cuenta de
4.500 horas de monitoreo por parte de los distintos usuarios del estrecho, hasta el término
de 2024.
Andrés Ruiz, manager de la empresa de turismo Whalesound, comenta que llevan más de
20 años monitoreando la población de ballenas jorobadas que llegan al Parque Marino
Francisco Coloane. “Esta iniciativa de WCS complementa los trabajos realizados y nos
vincula con los demás actores del maritorio, los cuales hoy en día son hartos más que en
un comienzo. El monitoreo constante de estos lugares ha sido nuestro propósito y a la vez
es parte de la propuesta valor de la empresa, que, además, como Fundación
Whalesound, divulga esta información. Es fundamental tener más y mejores observadores
en las áreas donde tan pocos tienen acceso. Fundamental para una correcta planificación
y fiscalización, para tender a mejores prácticas”, señaló.
Residuos marinos
Otra información relevante que los usuarios del estrecho están aportando es sobre la
presencia de acumulación de residuos en las costas. Hasta la fecha se han reportado 14
sectores con residuos marinos. Y, aunque se desconoce el origen de estos, como ocurre
en otros sitios identificados en Magallanes, tienen dos tipos de procedencia: de
actividades que se realizan en el mar y domiciliarias, proveniente de centros urbanos. Los
fuertes vientos de la región muchas veces arrastran los residuos de las ciudades hasta el
mar, convirtiéndolos en una gran amenaza para la salud y la vida de distintas especies.
Propuesta de plan operativo de monitoreo biológico en el estrecho de Magallanes
WCS Chile diseñó un plan operativo que propone estrategias de articulación entre actores
públicos y privados clave, para lograr una colecta y análisis de datos que permita
robustecer la información biológica para la toma de decisiones, según lo establecido en
los decretos de creación, planes de manejo o programa de monitoreo, de las distintas
áreas marinas protegidas de Magallanes.
“La implementación de esta herramienta permitirá optimizar el uso de los recursos
disponibles y el cumplimiento de las metas trazadas; además de cumplir con la
planificación estratégica para la Red de AMP del Estrecho de Magallanes”, menciona el
documento.
En diciembre de 2024, se realizó un taller para presentar y validar el plan operativo con
operadores turísticos, académicos/as, investigadores/as y profesionales de servicios
públicos. El encuentro entregó valiosa retroalimentación del grupo de actores, quienes
serán parte del piloto de monitoreo participativo de parámetros relevantes del estrecho,
durante este año.
Este plan piloto considera los datos reportados a través de SMART y se espera que
contribuya a una gestión más efectiva de las áreas marinas protegidas y que sea un
aporte para lo que será el nuevo Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas.