El viernes pasado, el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) marcó un hito en la región de Magallanes con la entrega de papas semilla certificada de la variedad Yaike a pueblos originarios. Esta iniciativa busca impulsar la producción local, promover la seguridad y soberanía alimentaria y preservar el patrimonio genético del cultivo de papas en la región.
Las semillas provienen del semillero más austral de Chile, ubicado en INIA Kampenaike, un espacio que lidera proyectos de innovación en el desarrollo de papas con apoyo de entidades como el Gobierno Regional de Magallanes. La Directora de INIA Kampenaike, Claudia Gómez Nome, destacó el rol del equipo de investigación liderado por la investigadora Carolla Martínez, señalando que su trabajo es fundamental para avanzar hacia un futuro agrícola sostenible en Magallanes.
“La estrategia es que estas papas con genética adaptada a nuestra zona, quede en manos de los pueblos originarios, un patrimonio genético que INIA ha producido, conservado y multiplicado hasta ahora. Esto asegura que este legado perdure y se fortalezca en las comunidades”, comentó Gómez Nome.
Por su parte, Bernardita Villalon expresó su satisfacción por este apoyo que permite sembrar con semilla certificada. “Una alegría de poder recibir la semilla que si uno lo adquiere es muy cara. Además de ser certificada porque es una investigación que hizo el INIA, entonces son las papas más productivas para la región”, señaló.
La investigadora Carolla Martínez detalló que se entregaron nueve toneladas de papa semilla de la variedad Yaike, beneficiando directamente a unas 150 personas de las comunidades indígenas.
“La papa que estamos entregando es Papa Yaike, que es una variedad nueva creada por INIA. Es de piel blanca, pulpa crema y es una papa que está creada para la agroindustria y consumo en fresco”, agregó.
La actividad contó con la presencia de Irene Ramírez, Seremi de Agricultura, quien subrayó la importancia de esta entrega. “Este esfuerzo se alinea con la estrategia nacional para avanzar en soberanía y seguridad alimentaria, fortaleciendo a las comunidades indígenas en su rol e importancia cultural en materias agroalimentarias en nuestra ruralidad regional”, señaló.
Por último la Directora Nacional de INIA, Iris Lobos, a través de un saludo virtual, destacó la relevancia de esta entrega que avanza hacia “el resguardo del patrimonio genético y el fortalecimiento de la seguridad alimentaria”.