Las organizaciones sociales requieren a veces de personas que cumplan determinadas funciones, con el objetivo de lograr llegar a las bases con la mayor cantidad de información y elementos para posibilitar el trabajo.
Por cierto, tal necesidad de gente que apoye va a estar directamente relacionada con la cantidad de organizaciones y personas que la integren. Los grandes sindicatos requieren de trabajadores que cumplan funciones administrativas y también las Federaciones, Confederaciones y Centrales Sindicales. Quienes allí trabajan deben tener un contrato en el que esté claro el sueldo, recibir el pago regular de los derechos previsionales y algunos beneficios como locomoción, colación y jornada horaria.
En la medida de que los recursos lo permitan se debe llegar a entregar aguinaldos y otras prestaciones que reciben regularmente los trabajadores, debiendo tener siempre claro que no se está en una empresa, sino en una organización social con un objetivo definido.
2.- Lo más importante en este particular grupo de trabajadores es el compromiso con la causa que defiende la organización que hace de empleadora.
Mantener al día los antecedentes de quienes la integran, contacto fluido y relación permanente entre ellos y con los afiliados, evitar faltas intempestivas o atrasos sin avisar a tiempo, pues eso perjudica las tareas del día a día son cuestiones básicas que deben estar siempre presentes.
No hay jerarquías entre quienes trabajan para una organización, pero sí debe existir respeto por los roles que cada uno juega dentro de ella.
Ser trabajador en una organización de trabajadores es un compromiso con los ideales de la clase trabajadora, y eso debemos tenerlo siempre presente aquellos que asumimos estas tarea