Cuando despedimos a la compañera Rosa Hueraleo, contamos a todos con quienes compartimos esos duros momentos, que habíamos conversado con ella previo a su hospitalización y concordado en escribir un pequeño texto en el que se pudiera recoger su accionar sindical, así como algunos elementos de su vida, que la hicieron destacar y transformarse en un referente.
Lo hicimos cuando no pensábamos que tendría el final que tuvo, teniendo en mente la necesidad de que el decir y el hacer de esta sindicalista pudiera ser conocido y con ello transformarse en un aliciente para tanta trabajadora y trabajador, que siente que puede apoyar desde la dirección de una organización al fortalecimiento de la misma, pero que muchas veces se resisten diciendo que no están preparados para ese desafío.
Rosa fue una persona humilde, de trabajo silencioso pero abnegado y con resultados positivos, producto de una gestión y entrega que en más de una ocasión superó límites.
Seguro hay otras y otros con estas capacidades en diferentes organizaciones y por eso este texto, que se ha transformado finalmente en un libro, busca rendir homenaje a una imprescindible y motivar a quienes han asumido la causa de la clase trabajadora, a no desmayar en su gestión pues la suma de todos los esfuerzos nos llevará a concretar la construcción de una sociedad mejor.
2.- Honramos a Rosa pero también a muchas y muchos que dieron literalmente su vida por la causa y nunca fueron reconocidos. Reconocimiento que no es para exaltar egos sino para mostrar caminos, porque es muy importante que los trabajadores sepan que pese a las trabas y dificultades, si se quiere avanzar en la dignificación se puede hacer, educandose en derechos, formando parte de sindicatos y accediendo a la dirección de los mismos, además de luchar sin pausas por todo aquello que se considera justo.
El agradecimiento a la familia, a sus pares dirigenciales, a su contraparte y a su Sindicato, por permitirnos culminar un trabajo del que estamos muy orgullosos y que pronto verá la luz para satisfacción de todos los que conocimos a Rosa Hueraleo y la tenemos en nuestra memoria.