Preocupación existe en los gremios del turismo de Última
Esperanza. Esto debido a que hoy 15 de septiembre se cumplía el plazo impuesto por CONAF, para
levantar las restricciones establecidas durante el invierno en el Parque Nacional Torres del Paine.
Pese a esto, aún no han sido notificados por la Corporación Nacional Forestal, lo que impide el
funcionamiento normal la operación turística y la programación de la temporada estival que ya
comenzó.
Para la gerente de la Asociación de Hoteles y Servicios Turísticos, HYST, Sara Adema Yusta, la
medida genera incertidumbre. “Se avecina un fin de semana largo, en el que esperamos que
visitantes de distintas partes de Chile lleguen a Torres del Paine. Muchos de ellos vienen
esperanzados en que no necesitarán de un guía para realizar el sendero a Base Torres. Aunque ya
se cumplió el plazo, esta restricción aún no se elimina, pese a la insistencia de los gremios, CONAF
no nos ha entregado una respuesta oficial, lo que nos genera incertidumbre. Estamos de acuerdo
con que la seguridad de nuestros pasajeros es lo más importante, pero necesitamos que
empaticen y que consideren el significado que tiene para el sector turismo seguir con esta
limitación, aun cuando los senderos ya se encuentran en buen estado”.
Durante esta quincena, guardaparques de CONAF y AMA han monitoreado el sendero Base Torres,
contabilizando la mayor cantidad de visitantes el 10 de septiembre, con 138 personas. Mientras
los operadores de este servicio han manifestado que el sendero se encuentra en buen estado, sin
nieve y hielo.
“Existe un compromiso por parte de la Dirección Regional de CONAF que consiste evaluar las
condiciones del sendero Base Torres antes del 15 de septiembre lo que es considerado como una
oportunidad para normalizar las operaciones y disminuir las cancelaciones de reservas que han
afectado gravemente a los visitantes y empresas que han llegado hasta este destino. Como así
también es relevante que se continue con las coordinaciones necesarias con las diferentes
instituciones públicas para garantizar una temporada con mayor normalidad considerando que la
comunicación oportuna es importante para las coordinaciones necesarias de las operaciones
turísticas y para que el turista reciba la información de manera anticipada”, comentó Adriana
Aguilar Lagos, gerente de la Cámara de Turismo de Última Esperanza.
Los gremios esperan que en las próximas horas CONAF entregue una postura definitiva respecto a
estas exigencias. Un paso significativo para la industria turística en la región y brinda la posibilidad
de proporcionar a los visitantes una experiencia segura en la Octava Maravilla.