Las orfebres magallánicas Constanza Cortés y Alejandra Tapia, formaron parte del Primer Encuentro Nacional de Mujeres Artesanas (Enma) 2023, que organizó recientemente, en la ciudad de Concepción, el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, más el apoyo de la Fundación Trabajo para un Hermano.
El evento, que reunió a 32 artesanas que han ejecutado proyectos gracias al financiamiento del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes (Fondart), se efectuó tras el propósito de visibilizar las distintas líneas de financiamiento que entrega el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, con miras a crear una Red Nacional de Mujeres Artesanas que potencie el trabajo colaborativo, contribuya al fomento de la artesanía nacional y releve la práctica de la disciplina con enfoque de género.
“Fue una experiencia sumamente significativa. Tuvimos la oportunidad de intercambiar ideas, colaborar y aprender de otras participantes. Fue inspirador presenciar las presentaciones de los proyectos financiados por Fondart, donde las artesanas compartieron sus experiencias, desde la concepción de la idea hasta su ejecución. Fue gratificante ver el trabajo y la dedicación que cada una de ellas aporta a su labor artesanal. Este encuentro reafirmó el valor y la importancia del trabajo de las mujeres artesanas en nuestra sociedad, así como su valioso aporte cultural”, comentó Constanza Cortés, con seis años de experiencia en la orfebrería y cuyas piezas poseen un profundo sentido de pertenencia, a través de la conexión entre materia prima y la biodiverdad de la Patagonia.
Para Alejandra Tapia, diseñadora y orfebre, dedicada hace 7 años a la joyería de autor, con principal interés en la visibilización del patrimonio natural y cultural, el encuentro se trató de “una experiencia realmente gratificante. En primer lugar, tuve la valiosa oportunidad de conocer a mujeres talentosas y generosas, apasionadas por su oficio. Fue inspirador interactuar con ellas y compartir nuestras experiencias en el campo de la artesanía”, comentó, junto con agregar que “en lo personal, tuve la oportunidad de exponer mi trabajo de joyería patrimonial dentro de la categoría de creación. Fue un honor compartir ese espacio con otras siete destacadas artesanas. Sin duda, este tipo de iniciativas fomentan la valoración y difusión del papel de la mujer en el campo de la artesanía. Al proporcionar un espacio de encuentro, colaboración y aprendizaje, se promueve el crecimiento personal y profesional de todas las participantes. Estoy realmente agradecida”, recalcó.
Durante su estadía, participaron de actividades formativas y de intercambio de experiencias, un encuentro cultural Trafquintú en el Centro Patrimonial Curarrehue, en San Pedro de la Paz, donde compartieron sus creaciones y conocimientos con el público, y disfrutaron de una jornada con música, sabores y saberes autóctonos. También conocieron la Tienda Manos del Biobío, el Teatro Biobío y el Parque Museo Pedro del Río Zañartu.