Como servicio público que garantiza el ejercicio pleno de sus derechos a toda persona en
condiciones de vulnerabilidad, la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) convocó a una
productiva instancia de diálogo a nivel regional, en conjunto con la secretaria regional ministerial
de Justicia, para debatir junto a usuarios (as) y representantes de sus distintas áreas, en torno al
acceso a la justicia y aspectos claves de su institucionalidad, y cómo debiera ser la figura destinada
a suceder a las CAJ.
Aquel proceso participativo tuvo lugar en caja de compensación La Araucana, y convocó a
dirigentes y dirigentes de juntas de vecinos, comunidades, organizaciones de adultos mayores, con
una mirada transversal de todas las temáticas que abarcan el acceso a la justicia en sí. Allí se
abordaron las necesidades jurídicas satisfechas e insatisfechas de la corporación, una
caracterización de las personas que acuden a aquel servicio y la situación de los postulantes que
ejercen allí su práctica profesional, quienes acompañaron también esta cita, junto a todas las
líneas de la CAJ, el estamento profesional y las asociaciones de funcionarios.
Al inicio de la jornada, la Seremi de Justicia y Derechos Humanos, Michelle Peutat Alvarado,
subrayó que “el acceso a la justicia es uno de los pilares fundamentales de nuestro programa de
gobierno y del Ministerio de Justicia y DD.HH. Ha sido fundamental a la hora de definir nuestra
agenda de trabajo y despliegue territorial, con el objetivo de ampliar la cobertura de la CAJ a
nuevas comunas de la región. Es por eso que hoy queremos dialogar con representantes de la
sociedad civil y avanzar en un diagnóstico que oriente nuestro trabajo y política pública en esta
materia”.
Alejandro Donatti Otárola, Director Regional de la CAJ, destacó este ejercicio realizado en pos de
un mandato ministerial para hablar sobre acceso a la justicia y nueva institucionalidad, que
convocó a funcionarios, sus asociaciones y a la sociedad civil, “para que nos puedan dar su mirada,
acerca de qué se requiere para establecer un sistema de acceso a la justicia moderno, eficaz y que
cumpla con los requisitos que la sociedad quiere”.
Al respecto, se ideó un formato y se generó una metodología tipo taller para sacar conclusiones
con un plenario y poder después traspasarlas a la división judicial del Ministerio de Justicia: “estos
conversatorios son insumos para que, a la larga, se den las condiciones para presentar un
proyecto, una ley o una nueva institucionalidad, moderna y eficaz de acceso a la justicia a las
personas”.
Aun cuando en el tema víctimas se hablaría de una Defensoría de las Víctimas, remarcó que la
Corporación de Asistencia Judicial es un organismo que engloba distintas líneas, no sólo víctimas,
sino también “la representación especializada de la infancia, la adolescencia, las personas
mayores, la defensa jurídica de los trabajadores y trabajadoras, el patrocinio judicial en materias
de familia y civil, que siempre ha estado al servicio de cada reforma legal en el país, y nuestra tan
reconocida oficina laboral de orientación y asesoría jurídica, de acceso universal disponible para
todas las personas que quieran hacer consultas en materias judiciales o acercarse la CAJ en
nuestras actividades de promoción de derechos, que ponemos al servicio de la comunidad en
articulación con el resto de la institucionalidad pública. Entonces yo creo que es bueno conversar
no sólo de materias independientes, aisladas sino también aglutinarlas en una institucionalidad
nueva que vaya a la par de la Corporación de Asistencia Judicial, vale decir, concentrar y crear un
sistema de acceso a la justicia moderno que abarque todas las materias que requiere la
comunidad”.
Entre quienes asistieron a esta instancia, Tatiana Leuquén Álvarez, de la Agrupación de Voluntarios
Oratorio Jacinto Bocco, resaltó la importancia desde la sociedad organizada de haber sido
considerados, pues nunca habían tenido acceso a conocer el trabajo que realiza la CAJ. Junto a su
interés de hacer uso de la oferta mencionada, en especial en el ámbito de educación digital,
señaló que “la inquietud que queda es poder socializar y dar a conocer a todos lo que aquí se
realiza, porque se desconoce en general”.
Mario Donoso García, Presidente de la Unión Comunal del Adulto Mayor, coincidió dentro de las
conclusiones con una falta de difusión dado el poco conocimiento de algunas personas con
respecto a la CAJ. En cuanto a su ámbito, valoró el buen trabajo que realiza la Corporación, con un
departamento exclusivo para la atención del adulto mayor (la ODAM), y que en algunas
situaciones se está dando esa atención inmediata a la tercera edad. “También es importante que
se sepa que al adulto mayor no se le cobra”, concluyó, a diferencia del resto del público a quienes
se hace una evaluación económica.