Con una participación récord de 474 estudiantes de Punta Arenas, Natales,
Porvenir, Timaukel, Río Verde y Cabo de hornos, de entre 8 y 18 años, culminó la
etapa de escritura del concurso “Jóvenes talentos de Magallanes, héroes del fin
del mundo” de Fundación Teraike.
Los participantes rescataron historias de personajes conocidos, desde
conquistadores a futbolistas o el cantante Pailita; de quienes forman parte de la
tradición local, como la Milonga, el Indio desconocido o el perro Chocolate y
también de personas que en forma anónima aportan a su entorno, su familia o
barrio.
“Estamos muy contentos por la gran convocatoria, con historias de estudiantes
desde Puerto Edén hasta el faro más austral de Cabo de hornos. Pero sobre todo
porque se notó que los jóvenes disfrutaron escribiendo, creando e investigando,
gracias al apoyo de sus profesores y padres. Así el concurso cumplió con su
objetivo de acercarlos y encantarlos con la lectura”, comentó Francisca Vogt,
directora ejecutiva de Fundación Teraike.
El jurado de la etapa de escritura estuvo compuesto por Rosamaría Solar, editora,
escritora y museógrafa magallánica; Pavel Oyarzún, escritor, poeta y profesor
magallánico; Laura Cena, estudiante del Liceo Contardi, ganadora del concurso
“Jóvenes talentos de Magallanes” en varias ocasiones desde 2017; María
Alejandra Vidal, pintora, escritora y miembro de la sociedad de escritores de
Magallanes y María Teresa Palma, directora de Fundación Teraike.
Ellos seleccionaron los doce cuentos ganadores, cuatro por cada una de las tres
categorías, y trece menciones honrosas. La categoría mayor, de 15 a 18 años tuvo
una mención más debido a lo difícil que fue seleccionar solo algunos trabajos
entre más de 200 cuentos de gran nivel.
La inspiración de los ganadores
Las personas cercanas que han marcado su vida y a quiénes admiran, inspiraron
muchos de los cuentos participantes como el de Emilia Soto, de 8 años, del
colegio Puerto Natales, quien ganó en la categoría menor con un cuento inspirado
por su abuelo. “Me inspiré en la historia de mi tata. Él de joven viajó a Magallanes
trabajando muchos años en la mina de Río Turbio, que queda cerca de Puerto
Natales”.
El cariño y admiración también están presentes en el cuento de Emily Muñoz, de 9
años, alumna de la escuela rural Seno Obstrucción. “Mi principal inspiración es mi
nana Rosa Águila Caro, mejor dicho, mi Kéwe Selás. La historia que cuento es
real, ella fue la mujer que ha tomado parte de su tiempo para enseñarnos su
cultura y hacerla parte de nuestras vidas. Siempre me ha gustado escribir, sobre
todo de astronomía y sueño algún día llegar a muchos niños por medio de mis
historias. En el concurso encontré la oportunidad de destacar a esta maravillosa
mujer y la labor tan importante que realiza”.
“Nuestra profesora de Lenguaje nos mostró un pdf sobre la vida de Dante
Baeriswyl, luego nos habló un poco sobre él y yo traté de relatar sobre la
experiencia de un paciente que imaginé al ser atendido por Dante Baeriswyl”,
comentó Santiago David León Chirinos, de 11 años, estudiante de la escuela
República de Croacia quien es originario de Venezuela.
Camelia Sepúlveda, de 11 años, alumna de la escuela rural Pampa Guanaco en la
comuna de Timaukel, rescató la historia de un personaje local. «Para crear mi
cuento, me inspiré en mi papá, en la profe Cata y en Rastras Grandes, el
personaje principal de mi historia, además porque quería demostrar que la gente
puede lograr lo que se propone si se esfuerza en ello y tiene el apoyo para
hacerlo».
Sofía Luarte participó en la categoría de 12 a 14 años contando su experiencia
familiar en el faro más austral de la región. “Quise escribir porque creo que lo que
hacen las familias en las diferentes islas es algo digno de ser reconocido. También
la intención fue escribir sobre mi experiencia personal en la Isla Cabo de Hornos,
que es algo que no muchos tendrán la oportunidad de experimentar, pero pueden
conocerlo a través de este pequeño relato y el hecho de saber que quedará
plasmado en un libro es muy motivante”
Desde Porvenir, Lucas Gutiérrez, de la Escuela Bernardo O´Higgins reflejó en su
cuento a la gran heroína de los niños: su mamá. «Para escribir mi cuento, me
inspiré en mi mamá; ella se esfuerza mucho por nosotros, trabaja en dos lugares
para darnos todo lo que necesitamos a mí y a mi hermano. Cuando era más chico
fui mal agradecido porque no me daba cuenta de sus esfuerzos, ahora que soy
más grande puedo ver todo lo que ella hace por nuestra familia».
Como esta, son muchas las historias familiares rescatadas por los participantes.
«Lo que me inspiró para escribir el cuento fue que mi tatarabuelo era Pascuailini
Rispoli, el que encontró al Indio Desconocido, y desde pequeña conozco su
historia detalladamente. Fue por esta razón que decidí escribir sobre él, para que
conozcan su historia», cuenta Ámbar Cisterna, alumna del Instituto Sagrada
Familia quien es una de las ganadoras de la categoría 12 a 14 años.