Con el objeto robustecer la infraestructura hídrica y asegurar el abastecimiento en cantidad y calidad, Aguas Magallanes se encuentra desarrollando un nuevo proyecto de inversión que permitirá asegurar, desde Parrillar, hasta el 45% de la demanda de agua potable de Punta Arenas. Las nuevas obras, consideraron un estudio previo para la impulsión y más de 1.200 metros de línea para el transporte del agua cruda desde el lago Parrillar, actualmente una de las principales fuentes de abastecimiento para la capital regional. Dicha obra alcanza los 550 millones de pesos.
Para la compañía, mantener esta línea operativa y en buenas condiciones, permite contar con esta fuente de agua cruda, considerando el nuevo escenario de escasez hídrica y cambio climático. Job Contreras Sáez, subgerente de Operaciones explicó que “la nueva tubería permitirá aumentar el caudal actual de 190 a 230 litros por segundos. En esta impulsión el agua que se capta desde el lago Parrillar es impulsada y transportada gracias a los equipos de bombeo y plantas elevadoras, a través de 50 kilómetros de tubería, para finalmente ser tratada en la planta de producción de agua potable de Punta Arenas”.
“Para la instalación de la tubería de HDPE de 500 mm, emplazada entre dos laderas de cerro de difícil acceso, se realizó una zanja de 1.262 metros de longitud. Si bien la fecha de término de los trabajos está programada para mayo de este año, una de las principales complejidades desde el punto de vista constructivo, para la ejecución de la obra, está dada por las condiciones climáticas y la calidad del suelo donde trabaja la maquinaria”, de acuerdo a lo señalado por Javier Correa Véliz, subgerente de Infraestructura.
La nueva infraestructura va en línea con el plan de inversión proyectado por Aguas Magallanes, para robustecer y asegurar el abastecimiento a la comunidad.