Tras una reunión sostenida entre los directores del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Cristian Figueroa y del SLEP Magallanes, Mario García Martínez, ambas autoridades acordaron el inicio de un trabajo en conjunto para abordar temáticas de Derechos Humanos al interior de los establecimientos educacionales públicos de la región. Las medidas apuntan a fortalecer el conocimiento en materia de resguardo de derechos de la infancia y adolescencia desde una óptica transversal.
Junto a lo anterior, el SLEP Magallanes e INDH establecieron un compromiso para avanzar en la protección, promoción y educación en materia de Derechos Fundamentales, que permita formar integralmente a las y los estudiantes como personas que se distingan por sus cualidades de desempeño, servicio y respeto a la dignidad humana.
Cristian Figueroa, director regional del INDH señaló que “estamos muy contentos de haber recibido a la autoridad que va a asumir esta enorme tarea que es impulsar la educación pública de calidad en la región de Magallanes. Hemos dado los primeros pasos para trabajar en educación en Derechos Humanos de manera transversal en todos los niveles educacionales. Vamos a asumir una tarea muy importante y sobre todo una tarea que es prioritaria pensando en las nuevas generaciones y las necesidades que tienen estos jóvenes y sus familias de contar con información sobre derechos fundamentales”.
Por su parte, el director ejecutivo del Servicio Local de Educación Pública de Magallanes, Mario García dijo que “trabajaremos en la capacitación de nuestros equipos y en incluir, en el curriculum, materias de Derechos Humanos, porque uno de nuestros mandatos como servicio es promover, a través de proyectos educativos, la formación ciudadana y el reconocimiento de los Derechos Humanos como la base de una convivencia democrática y de la socialización de niños, niñas y jóvenes”.
Finalmente, se aclaró que el trabajo abarcará la realización de actividades en que se abordarán temáticas como derechos, inclusión y no discriminación de estudiantes, apuntando a que todas las comunidades educativas sean inclusivas, lo que implica desarrollar un trabajo basado en el respeto y el derecho a la dignidad de las y los estudiantes.