Amigos y amigas, les cuento que, al igual que ustedes, estoy preocupado por el nivel de información con que cuenta la ciudadanía con miras al plebiscito del 4 de septiembre. Me preocupa el alcance y la penetración que ha tenido la campaña de fake news, desplegada desde hace meses por un sector político. Daré algunos ejemplos. Un querido y respetado amigo y compañero, me envió un mensaje de whatsapp, que circulaba en la comunidad del edificio donde posee un departamento en Viña del Mar. En este mensaje se difundía un video donde dos personas exhibían supuestas capturas de pantalla del SERVEL, agregando el hashtag #Fraudeelectoral y #FraudeServel. En este video se afirmaba que personas que figuran en registros públicos como Detenidos desaparecidos, estarían habilitados para votar. Y por tanto se vendría un fraude en el plebiscito. No es fácil reseñar, la indignación y dolor de mi querido amigo, quien fue abogado defensor de acusados en consejos de guerra, y luchó por la justicia y la verdad, cuando las balas llovían. Esa es una noticia falsa, una infamia difundida por grupos de ultra derecha, en redes sociales. La verdad sobre este asunto es que por ley N° 21.311 de 16 de febrero de 2021, se modificó la ley 18.556 Orgánica Constitucional Sobre Sistema de Inscripciones Electorales y Servicio Electoral, estableciéndose que:
“El Servicio Electoral deberá velar por que las personas víctimas de desaparición forzada o detenidas desaparecidas, individualizadas en el Informe de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación, en el Informe de la Corporación Nacional de Reparación y Reconciliación, y en el Informe de la Comisión Asesora para la Calificación de Detenidos Desaparecidos, Ejecutados Políticos y Víctimas de Prisión Política y Tortura, que figuren como inscritas en el Registro Electoral, estén en los padrones electorales que se determinen para cada elección o plebiscito con la calidad de «Persona Ausente por Desaparición Forzada.» (BIBLIOTECA DEL CONGRESO NACIONAL, 2021). Esta modificación ya pudo apreciarse en las votaciones populares efectuadas en 2021, y constituye un verdadero “Memorial cívico”, en virtud al cual, 800 nombres de hombres y mujeres, víctimas de la dictadura militar, figurarán por siempre en el registro. De este modo, las futuras generaciones, podrán conocer los nombres de las víctimas de desaparición forzosa, los nombres de los detenidos desaparecidos. Por tanto, es absolutamente falso que dicha inclusión de nombres facilite alguna forma de fraude electoral, ya que, en el cuaderno electoral, la casilla del número de identificación de personas se encuentra pintado de gris, no se puede marcar, y el sitio donde el elector debe firmar después de sufragar señala “persona ausente por desaparición forzada”. El video que le llegó a mi amigo, no sólo circuló por ws, también por Facebook e instagram, con miles de reproducciones.
Otras mentiras que se difunden sistemáticamente, dicen relación con el contenido de la propuesta de nueva constitución. Se ha llegado a decir que no garantiza el Derecho a propiedad, en circunstancias de que si está consagrado en la propuesta de nueva constitución. «Toda persona, natural o jurídica tiene derecho de propiedad», con exclusión de aquellos bienes que la naturaleza ha hecho comunes a todas las personas», como glaciares, humedales o alta montaña, y excluyendo aquellos que se declaren «inapropiables», tales como el agua, el aire, el mar territorial o las playas. Tampoco se establece el fin de la educación privada, ya que el texto que se somete a plebiscito define un Sistema Nacional de Educación que incluye instituciones creadas «o reconocidas» por el Estado. Del mismo modo se ha difundido que se termina con la salud privada, en circunstancias de que la propuesta crea un Sistema Nacional de Salud, que podrá estar integrado por prestadores públicos y privados. Lo que desaparece es la figura de las Isapres como se conocen hoy, ya que no podrán recibir las cotizaciones obligatorias de salud. Sin embargo, podrán transformarse en seguros de salud privados, y voluntarios para quien desee contratarlos en forma adicional a la cobertura del sistema nacional de salud.
Sería muy extenso de enumerar las afirmaciones falsas que se difunden a diestra y siniestra. El propio SERVEL ha elaborado un archivo con mensajes, que ha ido desmintiendo a través de sus redes sociales institucionales. Entre ellos, algunos referidos a que se permitiría votar a personas inmigrantes sin cumplir requisitos, o a personas condenadas por la justicia. Asimismo, se ha desmentido posteos donde se afirma que no se cursará multa a quienes no concurran a votar. Lo cierto es que la votación del 4 de septiembre es obligatoria para quienes tengan domicilio electoral en Chile y sin límite de edad.
Diversos expertos y analistas coinciden en que el propósito de la difusión de noticias falsas, informaciones con contenido erróneo o injurioso, es crear un clima de confusión, de polarización, incitar emociones como el temor, o la rabia. En el fondo, el impacto personal que producen en el ánimo de todos nosotros, desincentiva la participación en democracia, ya que impide o dificulta a las personas acceder a la información veraz y confiable, que sólo las fuentes directas facilitan. En este sentido, cobra valor lo expuesto el viernes pasado, por el presidente Boric, al dar inicio al Tercer Congreso Futuro Juvenil en Santiago. El presidente señaló » Recién íbamos entrando y una señora gritaba ‘merluzo, mamarracho’ y pensaba que esa señora, cuando abre sus redes sociales, seguramente debe tener puras interacciones que le refuerzan esos mismos prejuicios y esa misma opinión”. “Esto no lo digo en un mal sentido, porque también al revés, quienes hoy apoyan al gobierno seguramente en sus redes sociales les aparece una serie de interacciones en contra de otras personas con muy poca autocrítica respecto a lo que nosotros realizamos y eso está mal. Tenemos que encontrarnos entre quienes piensan diferente, tenemos que recuperar la sociedad». En eso radica el origen de la crispación existente hoy en Chile, no es sólo la definición que tomaremos el 4 de septiembre, entre dos opciones. Es un desafío a nuestra capacidad de empatizar, de comprender, de escuchar. Debemos ser capaces de ir con la verdad de frente, de convencer con la palabra, y no con amenazas o insultos. Sólo eso nos dará la victoria, sólo eso nos hará libres.
Ernesto Sepúlveda Tornero