El crecimiento del Imacec de noviembre fue de 3,1% con respecto al mismo mes del año anterior, ubicándose por sobre las expectativas del mercado (entre 1,8% y 2,5%). Destacando un crecimiento interanual de 4,1% y, por lo tanto, el mayor crecimiento de los primeros 11 meses del año desde el 2012. Chile vuelve a crecer más que el mundo, a pesar de la adversa situación internacional, siendo destacado como el mejor país de Latinoamérica para hacer negocios en 2019 y el 33° a nivel mundial, según un ranking publicado recientemente por Forbes.
La Secretaria Regional de Hacienda, Lil Garcés, destacó; Chile está en marcha: todos los esfuerzos estan dirigidos a la reactivación tanto económica como laboral de nuestro país, generando más y mejores empleos que se adapten al mercado actual.
Por su parte el Banco Central estableció su proyección de crecimiento del PIB en 4%, además de corregir al alza la inversión para 2018 -de 5% a 5,5%- y para 2019 – de 4,5% a 6%-. Por su parte, la OCDE corrigió su expectativa para Chile de 3,6% a 4,1%, además de destacar de manera favorable la agenda de reformas fundamentales impulsada por el Gobierno.
La Seremi Garcés enfatizó; estas cifras son una señal positiva y permiten dar estabilidad a las proyecciones como país, sin embargo nos plantean un escenario de mayor compromiso y trabajo para mantener el crecimiento y por sobre todo, dar confianza a la inversión en cada uno de los sectores de nuestra economía.
Teniendo en cuenta la base comparativa más exigente del segundo semestre del año anterior y un adverso escenario económico externo, es fundamental destacar el impulso que le está dando el Gobierno a la economía a través de: (1) el proyecto de Modernización Tributaria, cuyo objetivo es promover el crecimiento económico y la generación de empleos mediante dos principales ejes: impulso la inversión, y simplificación del sistema tributario; (2) la Ley de Presupuestos 2019, que es responsable con el aumento del gasto fiscal, pero que a su vez centra sus esfuerzos en la reactivación económica y en promover el desarrollo integral; (3) el impulso de las agendas de competitividad y pro empleo.