Tras permanecer casi un año cerrado al público, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) en Magallanes inició esta semana la reapertura del Parque Nacional Pali Aike.
Ubicada en las cercanías de la comuna de San Gregorio, el Parque Nacional Pali Aike se convierte en la quinta área silvestre protegida administrada por CONAF que es reabierta al público, sumándose al Parque Nacional Torres del Paine, Monumento Natural Cueva del Milodón, Reserva Nacional Magallanes y Reserva Nacional Laguna Parrillar.
Si bien la cercanía con San Gregorio, comuna que actualmente se encuentra en la fase 4 del plan del Ministerio de Salud Paso a Paso, permitía una más temprana reapertura, ésta no se concretó por la complejidad de las fases en que se encontraban las comunas aledañas.
Sin embargo, la evaluación coordinada entre CONAF y las instituciones vinculadas a este proceso, concluyeron que era ya factible iniciar el proceso de reapertura del Parque Nacional Pali Aike, el cual estará abierto de lunes a domingo desde las 9:00 hasta las 19:00 hrs.
Considerado como un parque de gran riqueza arqueológica y natural, el pasado mes de octubre del 2020 cumplió 50 años de existencia, hito que no pudo celebrarse como estaba planificado debido al contexto ocasionado por la pandemia del Covid-19.
El nombre Pali Aike significa «lugar desolado» en aónikenk, lengua utilizada por las etnias originarias de este sector de la Patagonia; aunque también se le conoce como «El Escorial del Diablo» ya que tenían mucho respeto por esta área al ser lugares de volcanes.
Se ubica a 196 kilómetros de Punta Arenas por la Ruta Internacional N° 255, internándose 26 kilómetros a partir de la Villa Punta Delgada, por la ruta Y 405 en la comuna de San Gregorio, formando parte de la denominada ruta de los parques de La Patagonia, la cual está constituida por 17 parques desde Puerto Montt a Cabo de Hornos integrando la Carretera Austral con los Canales Patagónicos y la Ruta del Fin del Mundo.
El Parque Nacional Pali Aike cuenta con una red de senderos de 18 kilómetros, de los cuales se dividen en un sendero de carácter cultural de 600 metros conocido como Cueva de Pali Aike donde se encuentra toda la información necesaria relacionada con la etnia Aonikenk.