Su preocupación manifestó el concejal de la comuna Germán Flores ante la cantidad de kilómetro de cañería de asbesto de cemento que hoy transportan el agua potable a los hogares de la ciudad, situación que a su juicio hace necesario que un organismo como es el Ministerio de Salud haga un análisis en profundidad de la calidad del agua potable que hoy consumimos, considerando que en Chile este material tiene prohibición de fabricación, manipulación e importación desde el año 2001 a fecha.
“En marzo de este año solicité a Aguas Magallanes un informe respecto a la cantidad de kilómetro de tubería de asbesto de cemento que actualmente transporta al agua potable a la población y la información oficial recibida por esta empresa, señala que de los 505 kilómetros de tubería existentes, 214 kilómetros corresponden a asbesto de cemento, lo que representa el 42% del total de la red, algo que por cierto me preocupa y por tal motivo he solicitado que podemos conocer la calidad y la pureza de este vital líquido”, expresó.
Más adelante el concejal Germán Flores agregó “el asbesto de cemento es altamente cancerígeno, de ahí la prohibición que hoy rige, está comprobado científicamente que inhalarlo produce asbestosis, enfermedad crónica que ha costado la vida a cientos de personas en nuestro país y a miles en el mundo”, manifestó.
“Esta solicitud la hago para que analicemos nuestra agua, sobre todo en aquellos sectores en donde existe ductos de asbestos de cemento, pues si bien está comprobado que inhalarlo produce cáncer, no hay estudios que demuestren que ingerirlo resulta inocuo para la salud de persona. Estamos hablando de instalaciones de tuberías que tienen 40 o 50 años, que obviamente van teniendo un desgaste con la fuerza del agua, es decir corrosión, soltando partículas de asbesto que no se disuelven, lo mismo pasa cuando estas tuberías se rompen”, dijo el concejal Flores.
“No se trata de crear alarma, lo que busco es que se analice el componente del agua potable para tranquilidad de todos. Por eso en la última sesión del concejo hice la solicitud al señor alcalde y a su vez he enviado un oficia a la Comisión de Salud del Senado para que se refuerce mi petición, además que me preocupa que a casi 20 años de la prohibición del uso del asbesto de cemento en Chile, hoy en Punta Arenas tengamos 214 kilómetros de esta tubería y que nadie tenga la responsabilidad ni la obligación de reemplazarla”, concluyó.